Las lágrimas que intentan inundar el espacio entre el ojo y el parpado, sentir ese caudal, intendando reprimirlo, la falta de aire que se anticipa al suspiro, las energias mermadas, en definitiva, unos momentos de soledad que quiero siempre cuando llegan, "disfrutar" sin recrearme, observar como estudio de mi mismo.
domingo, 26 de octubre de 2008
Tristeza
Las lágrimas que intentan inundar el espacio entre el ojo y el parpado, sentir ese caudal, intendando reprimirlo, la falta de aire que se anticipa al suspiro, las energias mermadas, en definitiva, unos momentos de soledad que quiero siempre cuando llegan, "disfrutar" sin recrearme, observar como estudio de mi mismo.
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2 comentarios:
Sacar de todo una lección me parece una actitud adecuada ante la vida.
Pensar que toda nuestra existencia va a ser un camino de rosas es tan irreal como creer que lo va a ser de espinas.
El mundo es dualidad, pares opuestos, ying y yang.... pero tras ellos siempre está presente lo "previo" a su propia existencia... ese vacío que los envuelve en una unidad que les da verdadero sentido.
Consecuentemente, todos deberíamos aprender a vivir cada momento, independientemente de que resulte dulce o amargo.
Artea said. :D
El problema es si no podemos "disfrutar" de la tristeza cuando antes no sabemos manejar el miedo. Paso a paso querido Artea...
;D
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