OBSERVADOR

Tenemos pensamientos erróneos constantemente, no quiero decir con ello que estemos viviendo en una continua equivocación, solo que hay una serie de imágenes que como poco debemos cuestionar. Cuestionarse estas ideas es a mi parecer el comienzo de una visión superior de lo que estamos viviendo, una ventana que se abre para mostrar una realidad no proyectada desde nuestra mente, nos convertimos en observadores. La posición de observador nos lleva a conocer la sublime herramienta que tenemos para funcionar en nuestro entorno, con la que disfrutar y sufrir al mismo tiempo, pero en definitiva una herramienta. Al convertirnos en el “ser que mira desde la ventana” vemos realmente los vicios propios y ajenos, nos damos cuenta de la grandeza del ser humano en toda su dimensión. Para llegar a esto cada “maestrillo tiene su librillo” o formula, yo solo digo que si objetamos los pensamientos, o si no tenemos argumentos para ello los dejamos pasar como una película en nuestra mente, nos daremos cuenta de lo absurdos que pueden ser algunos de ellos y lo reveladores que parecen otros. Con esto conseguimos encontrarnos con la esencia, El que mira, El que observa, llegando a un estado de lentitud, claridad de imágenes, de conceptos. Un estado de paz en el que la risa interna se instala en tu interior.

Por Marco