domingo, 2 de noviembre de 2008

Observar al pensador



Los pensamientos no dejan de fluir durante toda nuestra existencia, este ego creemos que somos nosotros y dado que los pensamientos se pueden variar, nosotros podemos cambiar con ellos. El pensamiento catastrófico es la forma de sufrimiento mas horrible, gran parte de los trastornos mentales mas crueles se basan en pensamientos erroneos que bombardean sin tregua. Nos creemos todo lo que pensamos, le damos credibilidad total a fantasías. Podemos parar este torrente de despropósitos cuando no son productivos ni prácticos, es lento al principio, pero al primer "click" con resultados, sube la autoestima!!!

Parece una obviedad, pero el ser humano se mueve por sus pensamientos. Es la forma de activar las emociones, de juzgar actos y semejantes, dejando atrás la esencia de nosotros mismos, el Ser. El Ser, llamado por muchos la conciencia, lo que somos realmente.

¿Cuando vemos al Ser? Cuando estamos en completo silencio, sin pensamientos, ahí encontramos nuestra esencia, todo se ve claro y sin juzgar.
¿Cómo podemos estar en este estado permanente de quietud y felicidad? Observando los pensamientos como un espectador, viéndolos pasar, sin luchar contra ellos, simplemente mirándolos.

Técnicas de relajación y respiración ayudan a llegar hasta este estado, pero por experiencia propia he de decir que con solo sentir el peso de tu cuerpo y observando los pensamientos pasar, se llega a este estado que debería ser la constante. Quizás haya sido la educación que he recibido, el ritmo impuesto por la sociedad actual basado en la anticipación, elucubrando constantemente sobre el pasado y futuro... Y sobre todo el estrés, son los factores que te hacen llegar hasta la ansiedad, gran indicador que te hace parar, aprender, reflexionar y variar el patrón de pensamiento para encontrarte o reencontrarte contigo mismo, el Ser.

3 comentarios:

Artea dijo...

Curioso post el tuyo por lo que en sí mismo significa dentro de tu andar por estas sendas de lo interno: tu propio proceso vital.

Cuando la mención del Ser aparece, salvo que haya sido traida al contexto del artículo en cuestión por un simple gesto de traerla, es que algo se ha tocado... aunque no se sepa muy bien el qué o tan solo haya sido por un breve instante.

Pero algo se ha tocado.

Hay una cierta actitud en esto del Ser. Una actitud que no solo se adquiere con ejercicios de relajación y respiración; o con lecturas y reflexiones....

Todo eso está bien y ayuda... pero la actitud es necesario construirla por uno mismo... y los materiales están ahí dentro.

Ese espectador que simplemente observa el paso de las nubes, sin intervenir, sin condicionar, sin pensar, sin hacer... consciente de que son circunstanciales al momento y que por encima de ellas -por negras que lleguen a ser- siempre brilla el sol en un cielo azul... sabe, en cada momento, qué es y qué no es... qué debe hacer y qué no debe hacer...

Simplemente lo sabe. No necesita reflexionarlo. Ni pensarlo.

Brota desde esa fuente interna... igual que la flecha, al soltarse, sale del arco directa al blanco.

Esencia. Unidad. Previo.

Apunta tu mirada en esa dirección. El camino probablemente está por ahí. Deja que te encuentre, antes que tratar de encontrarlo. Y cuando lo atisbes... camina.

Simplemente camina. :)

marcada dijo...

Estamos en ello, ya te iré contando...

Miguel dijo...

Yepp!! ....buenas tardes......te dejo un enlace de una bonita ruta por la Sierra de Espadan y Javalambre......la verdad es que me pone los dientes largos pero coincide con el Maraton de Espadan.....
http://www.rutometro.com/eventos/btt/javalambre/reglamento.htm

....jeje.....¿¿a que pica???

Saludos

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