miércoles, 31 de marzo de 2010

Original y Performance en estudio


Gramophonedzie ha lanzado a los clubs y pistas de baile una de la bombas más inconfundibles y particulares del año con Why Don’t You.

Un brebaje adictivo de house, funk y classic swing, Gramophonedzie – más conocido como el productor serbio y DJ Marko Milicevic – construyó Why Don’t You entorno a un sample de la famosa toma de Peggy Lee del clásico blues de Kansas Joe McCoy Why Don’t You Do Right?.


domingo, 28 de marzo de 2010

¿Estás bien?


A menudo nos encontramos la respuesta directa e inconcreta de la expresión de un sentimiento que percibimos en ese instante. A la pregunta "¿Estás bien?" Que tan frecuente nos hacen durante el día los seres mas cercanos y los no tan cercanos, nuestra respuesta es casi siempre la misma, "bien".
Sospecho que la pregunta no esta ni bien formulada, ni la contestación es tan genérica, o al menos es habitualmente mas emocional que física.
La pregunta quizá debiera ser mas concreta, aludiendo a sentimientos, no obstante somos humanos y sucumbimos constantemente a ellos:

¿Cómo te sientes? A lo que la respuesta no sería tan tajante con el "bien" socialmente manido. Tal vez, en el caso de que respuestas mencionen nuestras necesidades satisfechas, las palabras se encuentren en la lista que confecciono a modo de vocabulario para expresar mas claramente nuestros sentimientos. A lo mejor así, expresando con claridad, nos liberemos de lastre...:
¿Cómo os sentís?

abiertos
absortos
activos
afables
afectuosos
afortunados
agradecidos
alborozados
alegres
alertas
aliviados
animados
apacibles
apasionados
asombrados
atraídos
audaces
benévolos
bienaventurados
calmados
capaces
cariñosos
cautivados
cómodos
compaSIVOS
competentes
complacidos
comprenSiVOS
comprometidos
confiados
conmovidos
contentos
cordiales
descansado
deslumbrados
despejados
despreocupados
dichosos
efusivos
embelesados
emocionados
emprendedores
encantados
enérgicos
entusiasmados
equilibradus
esperanzados
estimulados
estupendos
eufóricos
exáltados
expanSiVOS
expectantes
exuberantes
exultantes
fascinados
felices
fortalecidos
fuertes
generosos
gozosos
humildes
ilusionados
independientes
inspirados
interesaclos
intrépicios
intrigados
joviales
jubilosos
libres
ligeros
luchadores
preparados
prosperos
prudentes
radiantes
realizados
reconfortados
regocijados
relajados
seguros
sociables
sorprendidos
sosegados
tiernos
tranquilos
válidos
Vigorosos
VIVOS

lunes, 1 de marzo de 2010

Esperando

Aguardando continuamente acontecimientos, nos marcamos unas metas de felicidad que a menudo nos llevan al desánimo absoluto ante el resultado final que nuestras expectativas no contemplaban como posibles. Si señor, estamos desgraciadamente esperando en la mayoría de los casos, no descubro nada nuevo, solo que aprovecho mis momentos de “lucidez” para expresar ideas que no me parecen descabelladas. Algo parecido al guión de la peli Despertares, que sin saber ni como ni por que, de repente todo es claridad y familiar a tu espíritu varado en una rutina de espacio tiempo, estableciendo un símil con el film mencionado, en el que una enfermedad es la causa del dormitar de sus personajes inertes en cuerpos sin ánimo alguno de expresar emoción humana.
A menudo oigo tópicos que se me hicieron muletillas para mis propias conversaciones, que ahora no hacen mas que reiterarme en la creencia de que no es que sean ciertas, si no que son máscara a mi parecer de una rutina que esconde pacientes esperas o desesperadas ausencias: “Que ganas de que pase el invierno”, “Mañana será otro día”, “En cuanto me case y tenga hijos estaré realizado”, “Esto se pasa con el tiempo” “Cuando vuelva mi padre estaré seguro”… Y así pueden encontrarse innumerables frases hechas, que nos definen en nuestros sentimientos y anhelos que buscamos que se produzcan con el factor tiempo como determinante absoluto.
Quizás se traduzcan esas frases en un martilleante pensamiento…: “En un futuro seré feliz”
Duro será siempre vivir con la esperanza de que ser feliz es cosa del futuro, mal asunto a mi entender si esperamos que nos venga dado con paciencia divina. Me resisto a creer esto, un marcador divino que según nuestra educación se cultiva con abnegado esfuerzo para llegar hasta la felicidad, estableciendo a largo plazo la máxima utilizada en la ciencia, como es la causa-efecto. No puedo entender que para ser feliz en un futuro haya que: Estudiar con ahínco sin pasión, cuidar de una familia que no se lo merece, derrochar vida o simplemente dedicarla a otro por encontrar al final del camino esta sensación de plenitud efímera, todo esto si se realiza con gusto y viviéndolo plenamente es fantástico, no lo dudo.
Pensamos además que somos inmortales, que siempre viene bien este pensamiento para tomar los riesgos necesarios y seguir viviendo, pero que nos ancla en esperas continuas sin caer en la cuenta de que el tiempo jamás está a nuestro favor, nadie ha sabido hasta ahora recuperarlo literálmente hablando. Esta falacia nos hace capaces de esperar todo tipo de acontecimientos, lógicamente le ponemos tanto énfasis que cuando llegan hasta nosotros nos pueden llegar a defraudar, con el consiguiente palo que supone haber estado derrochando ese tiempo precioso.
Pues eso… Que desde aquí el mensaje es sencillo, que la vida esta aquí, ahora, el que lo escribe se esfuerza a diario para no encontrarse de nuevo a lomos del pájaro tiempo hacia una vida que está por producirse, mejor me quedo en este lugar que en definitiva es el que tengo.

Marco

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